martes, 24 de enero de 2012

Duatló de Cerdanyola, (y muchas otras cosas que se quedaron en el tintero)

Uno de las curiosos efectos que estoy notando en mi vida últimamente es la disminución del valor absoluto en la relación “actividad/ tiempo” o, dicho de otro modo, que cada vez puedo hacer menos cosas en un mismo espacio de tiempo.

Si bien es cierto que mis dos mujeres me dan buenas concesiones a la hora de realizar mis prácticas deportivas, también es cierto que mis horarios se han ido viendo modificados aumentando un poco las actividades familiares y con la ausencia casi total de entrenamientos en la franja horaria de la tarde. No me puedo quejar, la vida ha cambiado a mejor aunque ello comporte madrugones o entrenos a horas prohibidas….

no hace falta decir nada más!!!


Asimismo, otras actividades que antes podía llevar a cabo con relativa normalidad, ahora se ha convertido en una odisea tratar de introducirlas en lo que dan las escasas 24 horas que dura un día y debo elegir muy bien con qué puedo adquirir compromisos para no poner en riesgo el resto de asignaturas en curso.

Entre ellas, el presente blog. Buscar un hueco para ponerme a escribir es complicado y sin material que me motive a dar el paso… pues, bien, puede suponer el vacío total de entradas durante casi dos meses, como ha sido el caso.

No obstante, la motivación va llegando y tras la retirada en la Media de Mataró, allá por diciembre, he ido aumento la forma física y las ganas de divertirme haciendo deporte.

Lógicamente, siguen los entrenos a horas raras y por circuitos extraños; pero esto también le ha dado un puntito de sal y pimienta al alejarme un poco de los entrenos “de toda la vida”.

Los días que siguieron a la Media de Mataró, allá por inicios de Diciembre, fueron desastrosos. No había forma de acabar un entreno con un atisbo de buena sensación y llegué a pensar en un punto de anemia por la flojera que me acompañó esos días.

Por suerte, pareció ser más una fatiga muscular que una falta de hierro, y a mediados de Diciembre noto que las piernas empiezan a generar más vatios de potencia que semanas anteriores, sobre todo en lo que a la bicicleta se refiere.

En el agua me siento bien y, pese a que los tiempos que voy tomando en la piscina no son mejores que el año anterior, tengo esa agradable sensación de leer mejor el agua… (Aunque también es cierto que algunas veces te lees un libro entero y al girar la última hoja, te preguntas: - ¿Pero de que narices iba? Y no te has enterado de nada.... ).

En la disciplina atlética es donde peor me veo… La falta de voluntad en el campo alimenticio me está lastrando en forma de grasa glútea o, expresado de forma más clara todavía, que me pesa el culo notablemente.

Aun así, gracias a lo acumulado en estos tiempos pretéritos, y algún que otro sobreesfuerzo mental; conseguí correr la Sant Silvestre en 37’36’’, pasando los primeros 2 kilómetros a media de 3’38’’ y yendo de más a menos, justo lo contrario de lo que recomendaría cualquier foro o revista especializada.

Pero, señores, lo que vale es el tiempo al pasar el arco y, para mí, fue más que satisfactorio finalizar el año echando babas al límite de las pulsaciones máximas y cruzando la línea de meta en posición 309 de 8545 corredores pese a que ello conllevara un dolor de cabeza que me acompañó esa noche hasta las 2 de la madrugada.

Con todo esto, decidí apuntarme a alguna duatlón de carretera. No es que me llamen demasiado la atención pero, al menos, sirven como escape al puro y duro entrenamiento solitario además de poner la cerecita de diversión que la competición siempre otorga.

Por fechas y disponibilidad, la escogida resultó ser la Duatló de carretera de Cerdanyola, de la cual Dani Charles nos dio buenas referencias de forma reiterada hasta rozar el cansinismo ;) y que en su primera edición cerró inscripciones con una semana de antelación.

algunos de los compañeros por los que uno agradece hacer deporte

Como me estaba sintiendo bien sobre la flaca en estas últimas semanas, tenía muchas ganas de correr la carrera aunque normalmente no me suelan salir muy bien las duatlones, competiciones demasiado explosivas desde el inicio para alguien que necesita ir aumento pulsaciones progresivamente, como es mi caso.

Sabedor de que la gente no corre mucho, sino muchísimo, en estas carreras, la estrategia a seguir era muy elaborada: Salir a saco desde el inicio, volar en la transición, pedalear como si fuera el último día de mi vida, cambiar las zapatillas en el tiempo que cae un rayo y tratar de darlo todo los últimos kilómetros a pie…. Vamos, con esta estrategia repleta de innovación e inteligencia, no podía fallar!.

Por supuesto, la noche anterior coincidió cena en casa con amigos y la elección no pudo ser más acertada: Reglete de queso con carne roja para reventar, ingesta de vino tinto y algún que otro orujito de hierbas (no daré el número exacto… ya sabéis que con uno no acabo del todo satisfecho y que no doy una cena por buena si no lleva como antecedente un par o tres de cervezas, jejeje)…. Al meterme en la cama, por supuesto de madrugada, ya no tenía ninguna duda: la carrera iba a salir bien!

Al despertarnos nos dirigimos Sandra, Amaia y el que escribe en dirección a la zona del Parque Tecnológico de Cerdanyola, donde discurrirá la carrera.

Buen material ciclista el que se ve alrededor, muchos euros metidos en boxes, y buen ambiente en las inmediaciones de la zona cero.

Voy a dar una vuelta por el tramo inicial del circuito ciclista y enseguida me doy cuenta que es exigente. Parece que tenga que ser un circuito plano donde los grupos serán la tónica general, pero los diversos repechos (alguno de considerable longitud) van a ser cruciales a la hora de romper grupos. Más aún si hay gente dispuesta a dinamitarlos….

Material en boxes completamente preparado y me dirijo a la salida. Me coloco en tercera o cuarta fila mientras los que saben que van a salir rápido se han colocado por delante.

Dan la salida, en ligero ascenso, y es que como si hubiesen lanzado millones de bombas fétidas de las que se hace urgente huir antes de que la peste quede impregnada en nuestros cuerpos de por vida…. Santísimo cielo! Cómo sale la multitud!!!.

Miro mi reloj y, pese a que llego a los primeros 500 metros a un ritmo en todo momento por debajo de 3’20’’, parezco un abuelito de paseo mirando obras. El grupo se ha estirado y ya no consigo ver a los que van por delante... esto es una locura.

Sigo a tope (y cuando digo a tope, es a tope) notando como avanzo con una total falta de técnica. Las manos van por un lado, las piernas desbocadas por otro y aun así voy viendo como algunos compañeros de sección se van alejando irremisiblemente. Llevo a Jordi Romero muy cerca y, a unos metros más allá me parece ver a Edu Gallardo. A Albert Grimaldo (menuda bestia corriendo) y a Lluis Vila (de otra galaxia), lógicamente, ni en recuerdos…

Consigo mantener un más que fabuloso ritmo durante los primeros 4,85 kms que dura el primer tramo a pie finalizando en 17’28 a 3’36´´/km de media y entrando en posición 44 en boxes.

Rapidísima transición, adelantando ya algunas cuantas posiciones y saliendo por delante de Edu y Jordi, quienes no enlazarán con el grupo ciclista que se forma en ese momento.

En el grupo que se ha formado de 6 o 7 duatletas, sólo un par vamos con fuerzas para dar relevos y el resto se dejan llevar así que, en uno de los repechos, el otro compañero (un chico del Blanes, creo recordar) y yo, decidimos cambiar la marcha y dejar al resto del grupo. Vamos avanzando a base de relevos hasta alcanzar el grupo donde va Albert, sobre el km 10.

Allí le comento al compañero del Blanes que me quedo a “descansar” pues el desgaste en esos 10kms ha sido importante y necesito recuperar.

Por lo visto él no está por la labor y, antes de finalizar la zona de ascenso, ataca dejando a todo el grupo que empieza a estirarse para darle alcance.

Pese a que mi intención es recuperar, un bicho interior me hace saltar al poco rato y acabar de romper el grupo que se disemina antes de llegar al giro de 360º, en el punto más elevado del circuito.

Me acoplo aprovechando la pendiente, ahora en ligero descenso, y fácilmente enlazo nuevamente con el duatleta del Blanes al cual se le han unido un par de unidades.

Poco a poco el grupo va in-crescendo repartiendo la labor motriz entre 3 ó 4 que nos encargamos de meter la leña en la caldera. Aun así, el ritmo de los últimos 5 kilómetros desciende un poco mientras la fatiga va haciendo mella y nos vamos acercando al momento de la transición.

Trato de colocarme en las primeras posiciones para evitar el colapso de entrada a boxes y me bajo en tercera posición de mi grupo encarando el laaaaaaargo pasillo que recorre en paralelo toda la longitud del parque de bicicletas.

Gran parcial ciclista, el 9º mejor tiempo y tan sólo una veintena de bicicletas sobre las barras.

Localizo mi número, cuelgo la bici tirando el casco sobre ella, rápido engarce de las voladoras y estoy ya en marcha para enfrentarme a los últimos 2,5Km de carrera a pie.

El último sector, repetición de parte del primer circuito de carrera a pie, empieza con una corta ascensión sobre asfalto a la cual le sigue una agradable zona de llano y un descenso gracias al cual consigo mantener un ritmo digno hasta llegar al terreno en ascenso, de algo más de 1km, con alguna rampa que se convierte en un calvario para mis maltrechas piernas.

Veo que tanto los corredores que me preceden como los que me persiguen, sufren su propia precesión en este pequeño ascenso a la carretera y no hay sorpresas de última hora en lo que a posiciones se refiere y voy a mantener la misma posición en la que entré en boxes al acabar la bicicleta.

Muy buenos los últimos 500 metros de carrera, en ligero descenso donde vuelvo a correr a ritmos inferiores a 3’40 para pasar por el bonito arco de llegada con buena afluencia de público y feliz por la carrera realizada.

Tiempo 2,5Km: 9’24’’ y parcial 34.

Tiempo total: 1h00’46’’ y 23º clasificado.

Muy feliz de haberme divertido durante la carrera, encontrándome muy bien sobre la bicicleta y mejor de lo esperado en la carrera a pie, voy saludando a los compañeros que llegan tras de mí:

- Albert Grimaldo, que aunque le falten kilómetros sobre la bici, al bajarse de ella, ha firmado el 7º mejor parcial de carrera a pie y eso sólo lo hace un portento de la naturaleza. Segundo sub23 a tan sólo 3 segundos del primero. Que gran, Albert!

- Jordi Romero, que ha mejorado la bicicleta de forma abismal y marcando el parcial 56 sobre la flaca, llega en posición 32 de la general… y con margen holgado en el parcial atlético.

- Edu Gallardo, que pese a no encontrar buenas sensaciones consiguió acabar entre los 60 primeros con buenos parciales, sobretodo en la parte a pie.

- Quique de Llorens: Empezó la cursa con una mano rascándose lo que no suena acompañando a otro compañero y que, sobre la marcha, decidió ponerse a progresar… pues parcial 23 ciclista y último parcial a 3’48 entrando entre los 60 primeros… y encima no ha empezado a entrenar la bici…insultante.

- Samu Madrid, al cual la patenidad no le ha restado mucha forma y llega a sólo tres posiciones de Quique.

- Dani Charles: No ha sido su día y, ya desde el inicio no ha tenido buenas sensaciones. La próxima será… seguro que no siguió la dieta precompetitiva adecuada.

- La familia Palomino: Jaime y Patricia, después de meterse (junto a Quique) 90 kilómetros el día anterior y acercarse a Cerdanyola desde Terrassa en bicicleta, todavía tienen la poca vergüenza de hacer la duatlón y acabar sobrados cómo si hubiesen estado sentados picando tapas… Jaime finaliza el 158 de casi 400 y Patricia (por cierto, hasta el jueves a las 13h en TV3 participando en “el gran dictat”), acaba 8ª en categoría femenina.

Mención especial merece el último de los compañeros que se ha unido a la sección, aunque ya es un viejo conocido de todos puesto que inició su carrera deportiva en el Terrassa. Se trata de Lluis Vila Aguilar, un hombre de otro planeta que llega con la motivación a tope y recuperado ya de una lesión pulmonar que le provocaron los ácidos tras el estallido de una batería eléctrica mientras desarrollaba su trabajo como bombero.

Lluis realizó la carrera, reteniéndose durante el primer parcial a pie a un ritmo de 3’10’’, rodando en el grupo ciclista inicial y, tras dejar la bici junto a cinco duatletas más, marcó nuevamente el mejor parcial a pie corriendo por debajo de los 8’ los 2,5kms finales y distanciando en más de 10 segundos al siguiente competidor….. Sin palabras.

Si a esto le sumamos que Lluis es un tipo humilde, con una sonrisa y una palabra agradable siempre en la boca… pues le hace ganarse la ovación que se llevó al subir a lo más alto del podio.

Felicitats Lluis, que bueno compartir sección contigo!.

Además, a nivel de clubs, conseguimos la tercera plaza junto al Mataró y al Prat.

Y a nivel de grupos de edad, en pre-viejos, me situé en tercera posición…. Datos sin relevancia, pero que me hacen gracia, jejeje.

Con respecto a la organización de la carrera, desde mi humilde opinión, hay que darle a la sección de triatlón del club de Hoquei Cerdanyola un 10 como la copa de un pino. Todos los detalles se han cuidado con esmero y se nota la multitud de horas de cariño y de experiencia deportiva que le han puesto los organizadores.

Aspectos como el trazado ciclista con un altísimo grado de seguridad, el generoso número de amables voluntarios, los metros de cinta marcando el circuito, la bosa de obsequio donde se agradece encontrar un fuet y un vino (entre otras cosas), el muy currado blog con continuas actualizaciones, el fabuloso reportaje fotográfico que han colgado en dicha web, la zona habilitada para recoger la bolsa con todas las carpas de colaboradores (ya me gustaría haber encontrado una feria del corredor así en alguna competición que se las da de “internacional”) y un sinfín de pequeños detalles que marcan las diferencias entre las cosas bien hechas y las cosas muy bien hechas.

Muchas felicidades a la organización, todo un ejemplo en su primera duatlón de carretera.

Y ahora a seguir sumando lo que se pueda y a tratar de hacer alguna tirada larga que me garantice acabar de forma digna la Media de Granollers, en dos semanas. Acabando entre 1h22’ y 1h24’ ya me daría por satisfecho.

Un par de semanas tras Granollers nos iremos a divertir al Prat, en la duatlón de carretera por equipos donde, el principal aliciente estriba en correr la duatlón con compañeros manteniendo el grupo cohesionado y trabajando en equipo para tratar de entrar en meta con el mayor número de integrantes y en el menor tiempo posible...