El domingo tuve una de esas experiencias que se te quedan marcadas de por vida, de las que escriben la historia personal de uno mismo….
Espero que un día les pueda explicar a mis hijos, o a los hijos de mis amigos, o a mis sobrinos que “una vez, allá por el 2010, le di dos vueltas al parque en bicicleta de carretera” y que pueda ver en sus ojos algo así como “ Este viejo estaba como una cabra!! “, jajaja….
Pero sin adelantar acontecimientos, el sábado también teníamos una sesión interesante: Test de 1500 con neopreno + 1h15’ carrera a pie.
El miércoles agarré algún tipo de virus que me durante tres días dejó hecho polvo, con un continuo dolor de cabeza y con fiebres intermitentes así que me pasé hasta el mismo viernes noche a base de Ibuprofeno y Paracetamol y con la pena en el alma puesto que veía que no llegaba sano al fin de semana, el cual prometía interesante.
Entre la Semana Santa y la tontería febril, no había podido meterme en el agua desde hacía diez días y, teniendo en cuenta mi última experiencia con el neopreno en la piscina, tenía miedo incluso de no acabar el test de 1500m.
Por suerte el sábado me desperté sin fiebre y bastante entero, con una tos residual pero nada importante así que me preparé el material y me fui hacia el club sin saber si podría hacer los 1500m o no.
Charlita con los compañeros, que hoy no somos pocos… unos 25 para ser más exactos entre el test de 1500 con neopreno para los de larga distancia y los de 800 y 400 para los que preparan triatlones más cortas… mientras me voy colocando el neopreno, con especial atención a las mangas para intentar ir lo más suelto posible de brazos dentro del agua.
Me tiro al agua al tiempo que los compañeros ya han finalizado el calentamiento. Yo a lo mío, a probar unos metrillos para ver qué tal me encuentro. No noto ningún mareo, que ya es buena señal y hago algunas series de 50m muy suaves para irme probando a mí mismo.
Enseguida Jordi indica que a la roja arriba se empieza…. Ya no tengo tiempo ni a pensármelo!.
Estoy en el mismo carril que Jordi Pardina y en los carriles siguientes están situados los que, teóricamente, llevarán el ritmo más lento quedando al otro lado los que llevan el cuchillo entre los dientes.
Mucho mejor así, sin presión debido a ritmos locos pues hay que intentar acabarlo… sólo sumar metros con el neopreno y consciente de las limitaciones que uno tiene en este momento.
Empieza el test, primeros metros dentro de un ritmo asumible y finalizando los primeros 100m en 1’22 para pasar a regular un poquito más los siguientes metros hasta estabilizarme en 1’30’’ dentro de la comodidad y contento cada vez que consigo sumar 100m más al cómputo total. Me voy guiando por el reloj y confirmando el ritmo. Cuando veo que me he pasado de lento, aprieto un poquito más y consigo recuperar un par de segundos.
Llego al 1000 bastante bien y sigo pensando en finalizar los 1500m con solvencia así que reservo fuerzas para llegar al final sin estresarme en exceso.
En los últimos 200 metros fuerzo el ritmo un poco más y bajo nuevamente de 1’30 estos parciales.
Tiempo final, sin pena ni gloria, 1h22’14’’ pero que me sabe a miel, además no me ha molestado el neopreno en exceso… vamos por el buen camino!.
Del resto de compañeros, hay de todo un poco: desde los que han nadado en tiempos que yo no haría ni con aletas (Casoni en 19’ o Hurtado en 20’), pasando por los que estamos en buenos tiempos (Sergio, Samu, Isma, Mendoza – rozando los 12’ – quince segundos arriba o abajo), hasta los que han tardado más en completar el test (Charles, 27’18’’ y Fabra, 29’31’’ lo cual nos permitirá verle quitar pegatinas ya subidos a la flaca).
En la transición de carrera a pie, sólo voy a hacer una media hora pues, entre que el tiempo se ha tirado encima y que una tos seca me empieza a atormentar a la altura del Egara, decido dar el día por bueno y volverme al Club para tomar una ducha caliente.
El sábado por la noche, con el corazón en un puño, me da la una de la madrugada preparando bocadillos, barritas, geles, hichando ruedas, la ropa, etc, etc, etc… parece que me voy de viaje una semana, jajaja…
6:30am, suena el despertador y procedo con el desayuno, traje de luces, repaso del material y camino del matadero…
No hay demasiada gente en la salida aunque me entero que 6 personas ya se han puesto en marcha y otros van goteando a medida que avanzan los segundos.
La idea es realizar una vuelta al parque cronometrada sin drafting (norma aplicable a los de larga distancia, mientras los que preparan corta pueden hacer lo que les venga en gana). Esto supone unos 90km con 1400m de desnivel positivo acumulado.
Al finalizar, unos cuantos locos, nos aventuraremos a dar una segunda vuelta en grupo para ahondar en la propia miseria mental y física… experimentar en lo absurdo, vamos!, completando unos 180Km y 2800 de desnivel positivo.
Tomo la salida y hago el Terrassa-Castellar más rápido de mi vida. No se la media al llegar a Castellar pero sí tengo claro que si sigo a este ritmo no llego ni al perro así que empiezo a tomármelo con más calma… Veo como la distancia con Alex se recorta pero al llegar al perro me veo en la necesidad de bajar el plato con demasiada antelación y eso significa que la potencia ya se está gastando y hay que tirar de ritmo y cadencia.
Cristian me pasa en la recta previa al perro con facilidad mientras Samu y Fabra lo hacen en la siguiente curva….. pero, vamos a ver!!!! Qué coño han desayunado estos????. Y encima Fabra sube hablando como si estuviese tomando un café con leche:
- Isma!, no llevo el pulsómetro puesto!- Me dice.
- Tranquilo, debes ir a 80!!! – Le grito durante el ínfimo momento en el que coincidimos.
Y ahí se van como cohetes -
Mejor no pensar demasiado y seguir a lo mío pues, de lo contrario, uno agarra una depresión tal que necesitaría 30 ó 40 Argentinos para el tratamiento…
Empiezo a darme cuenta de que, en cuanto me pasen Elias y algún otro que haya salido (Edgar, Casoni, et…), iré el último…. Me cago en…. Hay que apretar las nalgas!!!.
Al iniciar la subida al 25 ya tengo a tiro a alguien que va de blanco… no consigo ver quién es pero creo que es Carlos Restoy…. Desde la distancia saludo levantando el brazo haciendo guasa y bromeando responde golpeando el manillar a modo de rabia… si es que no se lo pasa bien el que no quiere..
En las curvas le alcanzo, es Xavi Bigordà… Tras algunos comentarios por ambas partes me pregunta:
- Quién viene por detrás?
- Pues creo que Elias y alguno más- respondo.
- Joder! Voy a quedarme el último!!!
Ja, ja, ja, eso iba yo pensando hace un rato.
Tiro para arriba camino del siguiente punto blanco en la distancia. Esta vez si, Carlos Restoy.
Durante el descenso, Xavi Bigordà vuelve a colocarse detrás mío respectando la distancia a la perfección… eso es ser legal!!!.
Alcanzo a Carlos y estamos un rato rodando en paralelo. Aunque no se permita rodar en paralelo, nos tomamos unos segundos de relax hablando sobre como han pasado las balas de casco aerodinámico y relajándonos un poquito.
Se inicia la subida al carro y ahí si que no quito el plato. Empiezo a abrir distancia con Carlos y Xavi mientras me acerco rápidamente a otro compañero que va por delante. Creo que es Sergio pero todavía no lo puedo ver con claridad.
En una de las zonas donde quedamos en paralelo a diferentes alturas nos reconocemos y no podemos evitar las risas mientras le hago una señal con mis dedos indicando que voy a por él, jajaja.
Final de subida y le alcanzo mientras se está comiendo una barrita.
Hacemos la bajada hasta Navarcles a base de relevos, siempre guardando las distancias legales y, una vez se pone la carretera cuesta arriba en Navarcles me voy por delante hasta que se me cae el gel que estaba preparando para afrontar los 20km de ascenso.
Entre el coste que tiene el gel y que sólo me queda uno más, decido que los segundos que pueda perder no tienen demasiada relevancia así que doy media vuelta y vuelvo sobre mis pasos a recogerlo.
En ese momento pasa Sergio riéndose de mí.... bastardillo!, y unos segundos más tarde, Carles Perés… eh??? Pero si había salido por delante de mí y no lo había adelantado!
- Me he equivocado de carretera y me he ido hacia Sant Fruitós!!! – Grita mientras sigue carretera abajo.
Monto en la bici y salgo unos metros detrás de él. Le grito en un momento en el que está a punto de tomar la ruta equivocada nuevamente y lo adelanto unos metros más adelante. Es la primera vez que hace esta ruta, se ha pasado con el ritmo y lo va a pagar muy caro… Estenalles no perdona.
También adelanto a Sergio no sin soltar alguna vacilada verbal y tiro de plato durante un primer kilómetro hasta que nuevamente la potencia empieza a fallar y la cadencia se hace la reina de las herramientas de escalada.
Sin pormenores voy enlazando kilómetros, más lento de lo esperado pero cómodo en cualquier caso.
En este tramo, como era de esperar (por mi constitución pequeña), adelanto a algunos compañeros más: Ródenas, Mendo (quien también lleva un globo importante) y Pardina mientras veo como la distancia con Alex, aunque poco a poco, se va recortando.
Espero que un día les pueda explicar a mis hijos, o a los hijos de mis amigos, o a mis sobrinos que “una vez, allá por el 2010, le di dos vueltas al parque en bicicleta de carretera” y que pueda ver en sus ojos algo así como “ Este viejo estaba como una cabra!! “, jajaja….
Pero sin adelantar acontecimientos, el sábado también teníamos una sesión interesante: Test de 1500 con neopreno + 1h15’ carrera a pie.
El miércoles agarré algún tipo de virus que me durante tres días dejó hecho polvo, con un continuo dolor de cabeza y con fiebres intermitentes así que me pasé hasta el mismo viernes noche a base de Ibuprofeno y Paracetamol y con la pena en el alma puesto que veía que no llegaba sano al fin de semana, el cual prometía interesante.
Entre la Semana Santa y la tontería febril, no había podido meterme en el agua desde hacía diez días y, teniendo en cuenta mi última experiencia con el neopreno en la piscina, tenía miedo incluso de no acabar el test de 1500m.
Por suerte el sábado me desperté sin fiebre y bastante entero, con una tos residual pero nada importante así que me preparé el material y me fui hacia el club sin saber si podría hacer los 1500m o no.
Charlita con los compañeros, que hoy no somos pocos… unos 25 para ser más exactos entre el test de 1500 con neopreno para los de larga distancia y los de 800 y 400 para los que preparan triatlones más cortas… mientras me voy colocando el neopreno, con especial atención a las mangas para intentar ir lo más suelto posible de brazos dentro del agua.
Me tiro al agua al tiempo que los compañeros ya han finalizado el calentamiento. Yo a lo mío, a probar unos metrillos para ver qué tal me encuentro. No noto ningún mareo, que ya es buena señal y hago algunas series de 50m muy suaves para irme probando a mí mismo.
Enseguida Jordi indica que a la roja arriba se empieza…. Ya no tengo tiempo ni a pensármelo!.
Estoy en el mismo carril que Jordi Pardina y en los carriles siguientes están situados los que, teóricamente, llevarán el ritmo más lento quedando al otro lado los que llevan el cuchillo entre los dientes.
Mucho mejor así, sin presión debido a ritmos locos pues hay que intentar acabarlo… sólo sumar metros con el neopreno y consciente de las limitaciones que uno tiene en este momento.
Empieza el test, primeros metros dentro de un ritmo asumible y finalizando los primeros 100m en 1’22 para pasar a regular un poquito más los siguientes metros hasta estabilizarme en 1’30’’ dentro de la comodidad y contento cada vez que consigo sumar 100m más al cómputo total. Me voy guiando por el reloj y confirmando el ritmo. Cuando veo que me he pasado de lento, aprieto un poquito más y consigo recuperar un par de segundos.
Llego al 1000 bastante bien y sigo pensando en finalizar los 1500m con solvencia así que reservo fuerzas para llegar al final sin estresarme en exceso.
En los últimos 200 metros fuerzo el ritmo un poco más y bajo nuevamente de 1’30 estos parciales.
Tiempo final, sin pena ni gloria, 1h22’14’’ pero que me sabe a miel, además no me ha molestado el neopreno en exceso… vamos por el buen camino!.
Del resto de compañeros, hay de todo un poco: desde los que han nadado en tiempos que yo no haría ni con aletas (Casoni en 19’ o Hurtado en 20’), pasando por los que estamos en buenos tiempos (Sergio, Samu, Isma, Mendoza – rozando los 12’ – quince segundos arriba o abajo), hasta los que han tardado más en completar el test (Charles, 27’18’’ y Fabra, 29’31’’ lo cual nos permitirá verle quitar pegatinas ya subidos a la flaca).
En la transición de carrera a pie, sólo voy a hacer una media hora pues, entre que el tiempo se ha tirado encima y que una tos seca me empieza a atormentar a la altura del Egara, decido dar el día por bueno y volverme al Club para tomar una ducha caliente.
El sábado por la noche, con el corazón en un puño, me da la una de la madrugada preparando bocadillos, barritas, geles, hichando ruedas, la ropa, etc, etc, etc… parece que me voy de viaje una semana, jajaja…
6:30am, suena el despertador y procedo con el desayuno, traje de luces, repaso del material y camino del matadero…
No hay demasiada gente en la salida aunque me entero que 6 personas ya se han puesto en marcha y otros van goteando a medida que avanzan los segundos.
La idea es realizar una vuelta al parque cronometrada sin drafting (norma aplicable a los de larga distancia, mientras los que preparan corta pueden hacer lo que les venga en gana). Esto supone unos 90km con 1400m de desnivel positivo acumulado.
Al finalizar, unos cuantos locos, nos aventuraremos a dar una segunda vuelta en grupo para ahondar en la propia miseria mental y física… experimentar en lo absurdo, vamos!, completando unos 180Km y 2800 de desnivel positivo.
Tomo la salida y hago el Terrassa-Castellar más rápido de mi vida. No se la media al llegar a Castellar pero sí tengo claro que si sigo a este ritmo no llego ni al perro así que empiezo a tomármelo con más calma… Veo como la distancia con Alex se recorta pero al llegar al perro me veo en la necesidad de bajar el plato con demasiada antelación y eso significa que la potencia ya se está gastando y hay que tirar de ritmo y cadencia.
Cristian me pasa en la recta previa al perro con facilidad mientras Samu y Fabra lo hacen en la siguiente curva….. pero, vamos a ver!!!! Qué coño han desayunado estos????. Y encima Fabra sube hablando como si estuviese tomando un café con leche:
- Isma!, no llevo el pulsómetro puesto!- Me dice.
- Tranquilo, debes ir a 80!!! – Le grito durante el ínfimo momento en el que coincidimos.
Y ahí se van como cohetes -
Mejor no pensar demasiado y seguir a lo mío pues, de lo contrario, uno agarra una depresión tal que necesitaría 30 ó 40 Argentinos para el tratamiento…
Empiezo a darme cuenta de que, en cuanto me pasen Elias y algún otro que haya salido (Edgar, Casoni, et…), iré el último…. Me cago en…. Hay que apretar las nalgas!!!.
Al iniciar la subida al 25 ya tengo a tiro a alguien que va de blanco… no consigo ver quién es pero creo que es Carlos Restoy…. Desde la distancia saludo levantando el brazo haciendo guasa y bromeando responde golpeando el manillar a modo de rabia… si es que no se lo pasa bien el que no quiere..
En las curvas le alcanzo, es Xavi Bigordà… Tras algunos comentarios por ambas partes me pregunta:
- Quién viene por detrás?
- Pues creo que Elias y alguno más- respondo.
- Joder! Voy a quedarme el último!!!
Ja, ja, ja, eso iba yo pensando hace un rato.
Tiro para arriba camino del siguiente punto blanco en la distancia. Esta vez si, Carlos Restoy.
Durante el descenso, Xavi Bigordà vuelve a colocarse detrás mío respectando la distancia a la perfección… eso es ser legal!!!.
Alcanzo a Carlos y estamos un rato rodando en paralelo. Aunque no se permita rodar en paralelo, nos tomamos unos segundos de relax hablando sobre como han pasado las balas de casco aerodinámico y relajándonos un poquito.
Se inicia la subida al carro y ahí si que no quito el plato. Empiezo a abrir distancia con Carlos y Xavi mientras me acerco rápidamente a otro compañero que va por delante. Creo que es Sergio pero todavía no lo puedo ver con claridad.
En una de las zonas donde quedamos en paralelo a diferentes alturas nos reconocemos y no podemos evitar las risas mientras le hago una señal con mis dedos indicando que voy a por él, jajaja.
Final de subida y le alcanzo mientras se está comiendo una barrita.
Hacemos la bajada hasta Navarcles a base de relevos, siempre guardando las distancias legales y, una vez se pone la carretera cuesta arriba en Navarcles me voy por delante hasta que se me cae el gel que estaba preparando para afrontar los 20km de ascenso.
Entre el coste que tiene el gel y que sólo me queda uno más, decido que los segundos que pueda perder no tienen demasiada relevancia así que doy media vuelta y vuelvo sobre mis pasos a recogerlo.
En ese momento pasa Sergio riéndose de mí.... bastardillo!, y unos segundos más tarde, Carles Perés… eh??? Pero si había salido por delante de mí y no lo había adelantado!
- Me he equivocado de carretera y me he ido hacia Sant Fruitós!!! – Grita mientras sigue carretera abajo.
Monto en la bici y salgo unos metros detrás de él. Le grito en un momento en el que está a punto de tomar la ruta equivocada nuevamente y lo adelanto unos metros más adelante. Es la primera vez que hace esta ruta, se ha pasado con el ritmo y lo va a pagar muy caro… Estenalles no perdona.
También adelanto a Sergio no sin soltar alguna vacilada verbal y tiro de plato durante un primer kilómetro hasta que nuevamente la potencia empieza a fallar y la cadencia se hace la reina de las herramientas de escalada.
Sin pormenores voy enlazando kilómetros, más lento de lo esperado pero cómodo en cualquier caso.
En este tramo, como era de esperar (por mi constitución pequeña), adelanto a algunos compañeros más: Ródenas, Mendo (quien también lleva un globo importante) y Pardina mientras veo como la distancia con Alex, aunque poco a poco, se va recortando.
Llego a lo alto del puerto consciente de que bajo mejor que Alex así que meto todo el desarrollo y tiro para abajo como un loco.
En el primer kilómetro adelanto a Guillem al cual saludo brevemente y sigo tirando de plato camino de Terrassa.
A la entrada de Terrassa, alcanzo a Xavi Aloy con quién también cruzo un par de voces y a Alex lo veo al final de la Avenida…. Je, je, je…. Ya es mío!!!.
Avinguda Bejar, a tope en mitad del carril a 40 por hora y pasando de los coches… Ja, ja, ja… cómo me lo estoy pasando!!! … pero creo que no lo voy a alcanzar.
Llegada a Can Petit y lo veo a escasos 100 metros por delante, últimos metros dándolo todo, paso a Isma Oliver al cual casi no reconozco y llegada al centro logístico de la prueba en un estratosférico 2h56’ y 29Km/h de media… buf!!!! Ni en mis mejores sueños!!!.
Viendo los tiempos del resto de compañeros, hay que quitarse el sombrero sobre la forma física de la mayoría…. Algunos han sido capaces de hacer la vuelta en medias superiores a 30Km/h… con 1400 metros de desnivel positivo… así no se puede, hombre!!!!.
A recuperar fuerzas a base de bocata de jamón y plátano cortesía de Sandra para afrontar el segundo round.
Un buen grupo empezamos la segunda vuelta donde unos cuantos ya han planteado hacer el regreso por la V en lugar de bajar a Navarcles, algunos por miedo a morir en el intento (cosa totalmente comprensible) y otros por horarios.
Los pocos inconscientes que quedamos para intentar completar una nueva vuelta al parque, Dani Charles, Fabra, Elias, Hurtado, Xavi Bigordà, Alex Frías y yo, finalmente conseguimos la gesta de llegar a Terrassa sin poner el pie en el suelo.
Fabra, Elias y Hurtado a ritmo se nos fueron yendo, como era de esperar, aunque también sufrieron (al menos Fabra y Hurtado) durante los últimos repechos mientras el resto íbamos esparcidos sobreviviendo como podíamos a los terribles 20km.
Al iniciar el puerto Dani avisa que va jodido y que irá tirando a su ritmo, los 3 máquinas se van yendo, yo voy pegado a la rueda trasera de Alex y Xavi Bigordà también se empieza a descolgar.
Yo empiezo a sufrir tempranito mientras miro escéptico los tramos de subida que se van abriendo a nuestro paso cada vez que tomamos una curva pero ahí sigo, a rueda de Alex con todo puesto (excepto el tercer plato) e intentando guardar algo para el postre de Estenalles.
No se ni cómo ya hemos llegado a Talamanca, me queda muy poco líquido y creo recordar que me tomo otro gel para intentar engañar al cuerpo. Todavía voy pensando que es muy posible que ponga el pie en el suelo así que me pongo el ipod en marcha y le digo a Alex que voy a seguir a mi ritmo, con la música puesta y que cuando me vea jodido del todo, bajo plato y con el molinillo puesto iré haciendo.
Voy haciendo la goma con Alex, Xavi nos ha pillado y llegados a la zona chunga volvemos a estirarnos quedando los 3 distanciados entre nosotros unos 20 metros de distancia. Pedalear ya se ha convertido en un suplicio con el desarrollo que llevo, el 39 es un plato demasiado grande para las escasas fuerzas que ejercen mis piernas así que cambio al fabuloso 32 dientes, eso si, bajando un piñón para poderme decir que no lo llevo todo puesto, jejeje.
El cuentakilómetros me confirma el estado en el que estoy subiendo el puerto y, en un momento dado, llego a ver el 10Km/h…. pero ahí estamos, sobre la bici y pedaleando.
Ya acaba lo peor y tomo la primera curva a la derecha que te deja en una zona algo más agradable. Esta es una zona en la que siempre me levanto, doy unas cuantas pedaleadas con fuerza y tomo velocidad para elevar el ritmo en el último kilómetro de ascenso… incluso en este estado semi-vegetativo, seguimos siendo competitivos y cada vez escucho el ruido de los radios de Xavi que se va aproximando…. Eso no puede ser!!! Tengo que llegar arriba antes que él como sea, jajaja!!!. Me levanto, me dispongo a dar mis cuatro golpes de pedal que me catapulten hasta arriba y pffffffffffffffffffffffffffffffffff……. El culo se me coloca automáticamente en el sillín sin poder ejercer nada parecido a fuerza desde mis piernas. No puedo evitar reírme de mi mismo… pero el éxito está asegurado… ya ni Dios me evita que le de las dos vueltas al parque.
Un par de curvas más adelante, con Xavi ya colocado dentro del campo visual de mis ojos, subo el plato nuevamente y voy enlazando vueltas de biela aumentando un poquito la velocidad y consiguiendo algo de margen sobre él…. Qué bonito, el compañerismo, jejeje.
Alex está unos 40m por delante así que los 3 estamos a punto de triunfar como la Coca-Cola y, de hecho, así lo hacemos unos segundos más tarde coronando el puerto con caras evidentes de agotamiento. Bajamos comentando la jugada… Xavi ha tenido un pequeño mareo durante los últimos metros de subida pero ya se ha recuperado. Llegamos a Can Petit y recepción con aplausos por parte de los primeros llegados.
Dani llega no demasiados minutos más tarde y también es ovacionado a su llegada.
Un día memorable…. No se si jamás lo volveré a repetir… pero mereció la pena!!.
La anterior semana, Semana Santa, a destacar los tres días de estancia en Mas Teixidor, Pedrinyà, a unos 15Km de Banyoles lo cual me permitió un par de entrenos fabulosos: 130Km dándole vueltas al circuito de Banyoles y otro buen entrenos de transición con Sergio y Carlos, los cuales quisieron visualizar el circuito de la B de Banyoles in-situ con un par de horas rodando a buen ritmo en bici y una horita aproximada de carrera a pie donde Carlos nos fustigó los primeros 30 minutos a ritmo de locos… También hubo buenos momentos de barbacoa (parrillada carne, sardinas, sepia, etc….) bien acompañada de cervecitas, vermutitos y digestivos…. Esto es vida.
Total de kilómetros semanales:
Semana 22:
Natación: 6000 m.
Ciclismo: 255 Km.
Carrera: 25 Km.
Semana 23:
Natación: 1700 m.
Ciclismo: 276 Km.
Carrera: 39 Km.
Me temo que todavía un volumen un tanto reducido…..
A ver lo tuyo no es que el explorer no esté configurado, lo tuyo es que gastas las letras del teclado cuando haces una entrada, por cierto me he agotado nada más de leerlo.
ResponderEliminarA propósito tus comentarios en mi blog los tenía aparcados esperando a ser moderados, (que yo sepa no había habilitado la función de moderer comentarios, ahora vigilaré un poco más)
Ánimo ya queda menos.