Duatlon por equipos del Prat

Hace mucho tiempo atrás tuvo lugar una carrera singular, la Duatlón por equipos del Prat… (vaya, me ha quedado como un pareado infantil… lo de infantil porque parece que lo haya escrito un niño, jejeje).
De esto hace ya casi dos semanas y todavía no había tenido tiempo material para escribir cuatro líneas… eso sí, creo que aprobaré los exámenes de Psicología, algo es algo.
El sábado 12 de Febrero nos congregábamos en el Prat un total de 83 equipos inscritos a esta original competición que consiste en completar 5,5km de carrera a pie + 20Km de parcial ciclista y un tramo final de 2,5km de carrera a pie nuevamente.

La prueba , al mismo tiempo, es el campeonato de Catalunya de Duatlón por equipos.. el hecho que sea la única competición de este tipo en Catalunya contribuye notablemente a que forme parte de tan honorable asignación.

No me presentaba con una especial motivación a la prueba… las continuas jaquecas que estaba sufriendo durante esa semana, los pocos entrenos de calidad y las pocas ganas de extenuarme (como suele pasar en este tipo de carreras cortas), no eran los ingredientes más interesantes para el coctel que en estas fechas me apetece tomarme… pero la verdad es que cada año, pese al sufrimiento, me divierto mucho y deseo volver al año siguiente.

Este año, compartía plaza en el equipo B del CNT con compañeros de muy buen nivel: Samu, Edgar, X. Duran y Alex Frias… todos muy buenos tanto en la carrera a pie como en la bici.

A diferencia del año pasado, en el que llegué con muy pocos kilómetros en bici, este año llegaba más preparado para el sector ciclista lo cual esperaba me diera ciertas garantías para poder finalizar la carrera evitando las rampas en los gemelos que siempre me acompañan durante la última transición de esta carrera.

Hay un buen ambiente triatlético, multitud de grupitos ciclistas arriba y abajo ultimando los preparativos antes de entrar a boxes.

Me congratula ver que hay gente que se queda mirando mi bicicleta…. Con la Ghost no me había pasado nunca… bueno, quizás sí, pero por otros motivos.

Junto a Alex nos vamos a rodar un ratito con los compañeros del equipo D: rodenas, Jordi Pardina, Guillem, German, Jordi Maiques i David García… un equipo con muy buen rollo. 2 ó 3 kms son suficientes para comprobar que la bici está en orden y es hora e volver ya para recoger al resto del equipo y entrar juntos a boxes.

Para variar, caras de no haber pasado buena noche por parte de la mayoría de miembros de la federación…. Por suerte, hay dos o tres que se salvan, el resto parece que estén tratando con convictos peligrosos cuando se dirigen a nosotros…. Ya haré algún comentario un poco más extenso un día que tenga más tiempo.

Llegamos a nuestra zona asignada, en las barras metálicas que servirán de soporte de nuestras flacas. Tenemos un espacio asignado cerca de la zona de entrada y empezamos a hacernos sitio para dejar las bicis mientras comentamos la estrategia … que si entraremos por aquí, que si salimos por este lado, que si el orden de los relevos……… todos afirmamos convencidos sabedores que cualquier estrategia no sirve para nada… legaremos desordenados, cada uno por el lado que haya podido entrar, nos pasaremos de largo de las bicis, no saldremos agrupados ni el orden de los relevos será en ningún caso el planeado anteriormente, jajajaja… pero cómo mola hacer planes!!!.

Ya han dado la salida a los primeros equipos de chicas así que, amablemente, nos invitan a abandonar los boxes apresuradamente.

Tengo un dolor de cabeza horrible… proveniente de las cervicales, que me han tenido “out” toda la semana. De hecho, todavía no me siento totalmente recuperado de mis andanzas Turcas… vaya Turca, valga la redundancia.

Los compañeros se van a calentar, yo prefiero esperarme un rato mientras tomo un Gelocatil para ver si se relaja el dolor imperante en mi cerebro… las salidas van un tanto retrasadas así que aguardo paciente a que la pastilla me haga efecto. De otra forma, no creo que pueda acabar ni el primer parcial. El problema en estos casos es que el dolor de cervicales acaba provocándome una migraña que me deja KO en pocos minutos, a veces llegando a provocarme vómitos…. Por suerte, parece que está mejorando así que empiezo a trotar un poco a mi aire para calentar, tan sólo unos pocos minutos faltan para que llegue nuestro turno.

En un abrir y cerrar de ojos ya estoy junto a mis compañeros colocado en la línea de salida y el dedo índice a punto de presionar el botón “start” del GPS… es curioso ver cómo esa estampa se repite una y otra vez por todos los participantes… dedo a punto de pulsar el botón de inicio.


Tras comentar que hay que vigilar con la salida, en la que fácilmente nos podemos embalar y coger un ritmo que no nos corresponda, acaba la cuenta atrás para ponernos por debajo de 3’30’’ los primeros metros…. Jajajajaja…. Si es que no falla.

Poco a poco vamos tomando nuestro ritmo crucero, que debe ser entre 3’45’’ y 3’50 y de esta forma enlazamos las 4 vueltas que hay que completar en este primer tramo a pie. Hemos llegado bastante enteros a boxes y tan sólo Samu, solicita no ser el primero en tirar en la bici para poder tener un pequeño descanso.


Empieza el festival: Entramos a boxes cruzándonos por delante de otro equipo con el que hemos compartido el último kilómetro a pie, cada uno de nosotros entre por un lado diferente y (por supuesto) nos pasamos de largo la situación de nuestras bicis… jajjajajaja… qué desastre!!!.

Cascos abrochados, bicis fuera… - Tenéis que salir todos juntos – Nos chilla un juez mientras espero al resto de compañeros que han sido algo más lentos cogiendo la montura.

Traspasamos la línea y “Alehop!!!”, sobre la bici de un saltito, pies dentro de las zapatillas y…………….. noooooooooo!!!! Las tiras se han quedado justamente al revés y por mucho que tire de ellas, las zapatillas no se cierran.

Algunos improperios salen de mi boca mientras pierdo un tiempo de oro en colocarme bien ambas tiras. De todas formas, veo que el desastre ha sido generalizado y el resto de compañeros también están peleando con su propia técnica.

Una vez estamos todos listos, nos colocamos tal y como vamos llegando y, efectivamente, el que está delante para empezar a tirar es Samu (justo el que había pedido quedar el último para descansar), el resto hemos quedado en un orden totalmente diferente al hablado anteriormente…. Todo según lo planeado, jejeje.

Sale Samu y paso yo al relevo, tras de mi va Xavi, después Alex y Edgar cierra el grupo. Los relevos, al principio, son cortos pero se van alargando por parte de Samu a medida que pasan los kilómetros. Cuando le paso yo al relevo me doy cuenta que Xavi va más justo pues el grupo se queda cortado y tengo que aflojar para reagruparnos nuevamente… pero lo importante es ir sumando kilómetros a la mayor velocidad media posible.


Ya han transcurrido 10kms desde que iniciamos y las fuerzas han ido menguando para todos excepto para la locomotora Samu que hace los relevos más largos y nos lleva con la lengua fuera al resto. Es brutal ver como mueve el plato y, aunque consigo mantenerme a rueda con relativa solidez, cuando se retira para que le relevemos y poder recargar la batería, uno se da cuenta que hay viento en contra y la velocidad del grupo baja ostensiblemente….

Puesto que mi sentido arácnido es una verdadera vergüenza, una de las rotondas a la que llego liderando el grupo, la hago en dirección equivocada y me toca dar un giro de 360º para volver a enlazar son los consiguientes segundos de pérdida que ello supone. Ya tan sólo quedan 5kms para finalizar el parcial y Samu hace el resto del trabajo para nosotros.



Llegada a zona de boxes, transición perfecta por parte de todos…. Lástima que a Xavi se le suben los gemelos por el desgaste de la bici y pierde unos segundillos que le forzarán a hacer los últimos 2,5Km descolgado ligeramente.

Como este año deben ser 4 los que lleguen a meta, no hay manera de levantar el pie. Hemos quedado Edgar, Samu, Alex y yo un tanto adelantados pero Xavi no puede aflojar puesto que, en caso que uno de nosotros pinche, él debe ser el cuarto que garantice el tiempo del grupo.

Edgar impone un buen ritmo y el resto aguantamos estoicamente hablándonos para ver qué tal vamos y pidiendo a Edgar que afloje en momentos en que fuerza un poco más de lo que el resto de miembros aguantamos. En mi caso, pese a que voy sufriendo, la verdad es que me queda un puntito todavía por dar y, esta vez, creo que conseguiré ser uno de los que aporte en el tercer parcial… otros años no he podido hacer nada más que llegar descolgado por problemas musculares así que va a ser todo un logro para mí.


En el último kilómetro forzamos un poco más y es alucinante ver como aguanta Samu tras el parcial brutal que se ha cascado en bici, casi en solitario… este año va a hacer mucha pupita. Alex suplica un par de veces un decremento del ritmo so pena de descolgarse y llegamos agonizando a los últimos metros para cruzar el arco en 1h00’46’’, posición 12 en el ránquing de equipos. Unos segundos más tarde llega Xavi, el cual se ha portado como un campeón haciendo todo el último parcial en solitario por si alguno moría por el camino.

Un 10 para el equipo B del CNT!!!.

Como cada año, debo reconocer que salgo con un fabuloso regustillo de la carrera y con ganas de experimentarla el año que viene, si todo acompaña.

La nota negativa, el afán lucrativo de la organización que está haciendo desmerecer la satisfacción global final del participante. A mí me parece fatal que se paguen 85€ por equipo para no recibir ni una triste camiseta al finalizar (al menos yo no vi que se entregaran), cuatro frutas y una más que discutible rehidratación y alimentación tras cruzar la línea de meta.

Está claro que el año que viene volveremos, pues la carrera en sí está bien organizada (el Prat es uno de los clubs pioneros experiencia en este tipo de eventos y de los que podemos aprender mucho en todo lo relativo a triatlón) pero los servicios al corredor cada año han ido en decremento y me parece un mal ejemplo para el resto de clubs que nos iniciamos en las labores organizativas.

En fin, la próxima ya será hacia inicios de Abril con el B de Banyoles pasando por una Mitja de Montornés a la que tengo bastante cariño y con la que llenaré los armarios de mi cocina, jajajaja..

Por cierto, del dolor de cabeza.... ni rastro!!!