miércoles, 17 de marzo de 2010

Semanas 18 y 19 (Del 1 al 14 de Marzo) – “Sunday, bloody Sunday”

Al igual que una salsa de restaurante Chino, las sensaciones agridulces se van alternando. El cuerpo ya empieza a soportar mayores cargas con menores tiempos de recuperación pero el coco todavía me dice que la gesta a realizar el 27 de Junio es demasiado osada para un tirillas como yo. Lo que más me está costando es, sin duda, aumentar el kilometraje en bicicleta y no me encuentro para nada cómodo dando pedales.

El viaje a Turquía por motivos laborales, entre el 1 y el 4 de Marzo, marcó la semana 18. Como positivo de dicho viaje, el trote cercano a una hora a una temperatura agradable por la costa de Estambul, paralela a la muralla que cercaba la antigua Constantinopla allá por el siglo IV.

Vista del entreno en el cuerno dorado - Estanbul

Aunque siempre me resulta un palo viajar perdiendo mis rutinas y costumbres por unos días, la verdad es que en Turquía me siento muy cómodo y ya se ha convertido en algo familiar pasear por las calles céntricas de Estambul, ciudad internacional y multicultural donde las haya donde la gastronomía y la gente tienen ese aire mediterráneo que tanto se agradece encontrar.
A la vuelta de Turquía, una sesión de natación para recordar como era eso de moverse dentro del agua y el sábado un buen entrenamiento de transición:

Con Sergio y Alex salimos a las 8:15h del club dirección Sentmenat donde damos la vuelta dirección Sant Llorenç Savall para realizar la vuelta al parque y que aparecieran los 100km en el cuentakilómetros.
Un cuarto de hora más tarde, cosa que nos costó una bronca de mil demonios, unos cuantos compañeros salían también desde el club para hacer la vuelta al parque.

El plan era sumar algunos kilómetros más para llegar a los 100 y engancharlos durante el camino. A la altura de Sant Llorenç nos atrapa Sergi Mendoza quien se ha dormido y va a toda máquina intentando acortar distancias con el resto.

No fue hasta llegar a Navarcles que los encontramos parados en la fuente mientras algunos se habían parado a echar un café…. Esta juventud que no tiene remedio!!!

El grupo no era nada desdeñable: Jordi Elias, Jordi Hurtado, Jordi Pardina, Cristina Bombardó, Dani Charles, Xavi Aloy, Xavi Gonzalo, Alex Pérez y Albert Ródenas (creo que no me dejo a nadie).

Reiniciamos la marcha con la mente puesta en los 20km que tenemos por delante y el grupo empieza a estirarse y romperse. Los primeros compases camino de Talamanca los hacemos a ritmo quedando un buen grupo formado por Elias, Pardina, Hurtado, Sergio, Mendo, Alex, Xavi Gonzalo y yo… lo hemos subido a buena media y llama la atención que, pese al poco entrenamiento de algunos como Hurtado o Mendo, han aguantado estoicamente todo este primer sector de subida…. Como está la gente!!!.

Segunda mitad de la subida, a partir de Talamanca y donde están las rampas de mayor graduación.

Jordi Elias no ha bajado el plato en toda la ascensión y pese a llevar su ritmo de paseo, nos lleva a todos ahogados. El grupo se va rompiendo: Sergio se empajara y se va quedando, Mendo y Pardina también se quedan rezagados, Hurtado va haciendo la goma (brutal) con lo cual nos quedamos Elias, Gonzalo, Alex y yo hasta llegar a la zona más dura donde Xavi también se queda.
Jordi sigue con el plato puesto y yo voy con los ojos inyectados en sangre dándolo todo cuando se gira y comenta: - Oye, si no os importa voy a hacer un progresivo…
Intento decirle amablemente: -Anda a la mierda, pisamosto!!! – pero tengo la boca tan seca que no se me separan los labios, jajaja…

Jordi desaparece en dos curvas y Alex y yo bajamos un poco el ritmo para garantizar que coronaremos el puerto con el corazón todavía latiendo.

Poco a poco van llegando el resto de contertulianos y procedemos al descenso sin demasiadas novedades más allá de la misteriosa recuperación de Sergio que nos lleva a toda leche camino de Terrassa… no deja ni que le entren al relevo!!!

Rápida transición en casa y completo con 30’ de carrera a pie a una media de 4’37’’ que me deja buen sabor de boca al finalizar la semana.


La semana 19 se estrenaba con una formidable nevada en todo el area de Barcelona, la más grande en los últimos “nosecuantos” años y el aspecto que tomaba el paisaje era espectacular.

Foto de la terraza de casa… creo que no la he visto nunca de esta forma:

(No disponible todavía)

Como no podía ser menos, hoy tocaba trotar al mediodía por la montaña para aprovechar este difícilmente repetible escenario, así que sobre las 13:30h me pongo en marcha hacia la Font del Janot para completar un circuito de unos 10km y disfrutando mientras las Mizuno Gore-tex se hunden por completo en la nieve virgen.

Muchos árboles caídos en mitad del camino dificultad la progresión hacia la fuente y supongo que tardaremos en verlo totalmente despejado de nuevo mientras parece que la nevada está cogiendo mayor fuerza.

Los últimos kilómetros, ya en la zona despejada del Egara, son especialmente duros pues está cayendo mucha nieve y un fuerte viento la proyecta contra la cara a alta velocidad….. esto es vidaaaaaaaaaaaaa!!!!!!. Se me han quedado las facciones rígidas como la Lomana pero ha valido mucho la pena.

El martes doblo sesión, al mediodía chapuzón y por la tarde un par de series de 5000 con Sergio y Alex en las pistas a 4’30’’ para ir sumando kilómetros a ritmo.

Al día siguiente salgo puntual del trabajo para ir en bici hasta el Km25 y poderme deleitar nuevamente con las vistas nevadas que todavía cubre la zona más allá de Sant llorenç Savall. Por le camino me encuentro a Alex Frias, Dani Charles, Jose Manuel y por lo visto Quique, Samu y Martí también han salido hace un par de horas…. Aquí no trabaja ni el tato!!!

Magníficas vistas desde el Km25 tomadas por Dani Charles con el movil:


Quique se ha aventurado a hacer una V y las fotos que envían son simplemente espectaculares:



A mi madre la operaban el jueves así que estuve recluido en la clínica Sagrada Familia entre el jueves y el sábado, durmiendo en un sofá-cama, mucho más sofá que cama y alternando bocadillos con la comida que mi madre no tocaba pues el postoperatorio lo pasó realmente mal debido a alguna reacción a la medicación o a la propia anestesia. Por suerte, el sábado empezó a comer algo y a recuperar fuerzas con lo cual el sábado por la noche le dieron el alta y ha acabado de recuperar fuerzas en casa gracias a la sopa super energizante que preparó Sandra.

Pese a no poder asistir a la charla que nos dio el megacrack Marcel Zamora para los miembros de la sección en el Club Natació Terrassa, por lo menos pude hacer alguna escapadita para entrenar.

Momento en que Jordi Elias le entrega a Marcel el mono del CNTerrassa personalizado, a modo de recuerdo y agradecimiento.

Me acerqué a mi amada Carretera de les Aigües, donde tantas y tantas horas estuve entrenando durante los 3 años que estuvimos viviendo en Barcelona.


Para quien no conozca este lugar, se trata de un camino totalmente plano ubicado en Collserola y desde el cual se tiene en todo momento unas vistas increíbles de Barcelona. Se pueden completar hasta 9 kilómetros seguidos (ida y vuelta 18Km) y todos los kilómetros están perfectamente marcados….
Normalmente puedes encontrar a atletas de la élite entrenando allí y cada vez que hay carrera importante en Barcelona puedes fácilmente coincidir trotando con las estrellas del atletismo… un paraíso para los deportistas.
Hace unos años estuvo rondando por allí una familia de jabalís totalmente acostumbrados al contacto con las personas con lo cual era normal ir trotando al lado de aquellas bestias sin inmutarse en absoluto…. No se si todavía rondarán por ahí.

En mi escapada hice algo más de 23Km en 1h48’ con últimos kilómetros en progresivo dejándome la vida. ¿Para qué? Y yo que se!!! Debe ser algún defecto congénito pues es algo que no puedo remediar en los últimos 2-3 km de este lugar… siempre acabo apretando ritmo.

El domingo, para finalizar la semana, tocaba la parte agria de la salsa.

Muchos de los compañeros del Terrassa se fueron a completar los 200km de la Brevet de Manresa.
Aparte de resultarme impensable realizar 200km a estas alturas tenía que estar en Sant Vicenç para celebrar el cumpleaños de un buen amigo y no me podía permitir el lujo de llegar más allá de las 12:15 a casa, así que me marqué una rutilla hacia Sant llorenç, Carders y Moià. Una vez llegado a Moià decidiría si tiraba dirección Tona o regresaba via Castellterçol y completaba dando vueltas por alguna zona cercana a Terrassa.

El día anterior he preparado un puñado de galletas energéticas en una bolsa, un montón de ositos de goma y dos botes de líquidos: unos con sales y otro sólo con agua para asegurar un cierto aporte energético durante la salida.

7:15am, me pongo en marcha.

La temperatura debe rondar los 0ºC pues el frío se va introduciendo a través de las zonas descubiertas de la cara y, a medida que me voy alejando de Terrassa, algunas clapas de nieve se resisten a disolverse en la tierra y permanecen depositadas sobre las zonas más sombrías de los arcenes.

Ando acoplado camino de Castellar y bajo la velocidad al aproximarme a una curva que parece mojada. Me tumbo a la derecha y de repente ambas ruedas pierden la adherencia por completo y me voy al suelo en la misma posición fetal que llevaba hace un momento sobre los acoples.
La curva está situada sobre un puente y enseguida veo que me deslizo hacía el otro carril (por suerte no hay ningún coche circulando en sentido contrario) y me dirijo peligrosamente hacia la valla que separa el puente del precipicio. Consigo cambiar la posición del cuerpo mientras por mi mente cruza la imagen de los motoristas retorciéndose para colocarse hacia arriba y minimizar así las lesiones… vaya tela!!!.
Con los guantes voy frenando el cuerpo y la bici se ha frenado contra la valla.
Mientras caía también me ha dado tiempo de ver cómo uno de mis bidones salía disparado en dirección a la valla y desaparecía hacia el precipicio.

Me pongo en pie dolorido por el golpe y un poco mareado recojo la bicicleta rápidamente y me coloco a un lado del puente.
Me siento por unos momentos para evitar una de mis usuales pérdidas de conciencia (mi cerebro trae de serie un complejo mecanismo de cobardía mediante el cual, al mínimo indicio de dolor, provoca una desconexión automática mediante desmayo…. Vaya bastardo, jajaja).

Algo más recuperado empiezo a valorar las pérdidas: chaqueta rascada, mallas rotas, rodilla sangrando, cambio trasero tocando los radios, palanca de freno movida…. El primer sentimiento que me visita es el de cabreo pensando que debo volver a casa si la bici ha quedado inservible.
Tras observar con un poco más de detenimiento me doy cuenta que se trata de una deformación en la patilla de aluminio que une el cambio al cuadro. La enderezo en un par de movimientos y el cambio vuelve a la vida, con algún pequeño desajuste, pero vivo de nuevo.
Como Murphy hace su trabajo de forma eficiente, de los dos botes de líquido que llevaba el que ha caído puente abajo es el de las sales, por supuesto. Desde lo alto de puente lo veo reposando 15 metros abajo entre la maleza…. Curioso lugar para acabar sus días de servicio. (Requiescat In Pace)

Vuelvo a subir a la bici y decido continuar para hacer un autoscanner en marcha, dirección a Sant Llorenç Savall. Paro un par de veces más a echar un poco de agua en la rodilla y a enderezar la palanca de freno y llego a Sant Llorenç Savall una hora más tarde de haber tomado la salida.

Vuelvo a mojar la herida, relleno de agua el bidón y de nuevo en marcha. Pienso que es un buen momento de comer algo pues el incidente me ha hecho perder energía en modo de nervios.
Con las morcillas en las que los dos pares de guantes me convierten los dedos es prácticamente imposible coger una sola galleta así que decido sacar la bolsa por completo del bolsillo. La extraigo mientras pedaleo sin manos, la abro y SORPRESA!!!!!... la bolsa está al revés, la abro y se van todas las galletas a tomar por culo en la calzado….. DIOSSSSSSSS!!!!!! Hay días en los que es mejor quedarse en casa con las ventanas cerradas.

Tras un repaso a los insultos más memorables de nuestra lengua introduzco nuevamente la bolsa vacía en el bolsillo trasero y me dirijo hacia Calders donde el paisaje está completamente nevado y la temperatura ha bajado sustancialmente.

Por primera vez en mi vida tomo la carretera dirección Moià y durante un par de kilómetros entablo una conversación con un ciclista de Calders que avanza hacia Moià para encontrarse con su grupeta a mitad de camino. Me explica las condiciones tan duras que han pasado durante estos días de nieve y tras taladrarlo con la historia de mi caída me advierte que la carretera camino a Castellterçol puede estar lleno de placas de hielo…. Perfecto!.

Ya en Moià, tomo el desvío hacia la derecha para rodar por una carretera agradable donde se alternan los toboganes suaves.

En un momento dado (Johan Cruyff) empiezo a cruzarme con Mossos motorizados que me indican que me debo parar…. No cero que me pidan la documentación, no? Igual me hacen soplar… ¿?¿?¿?.

Resulta que hay una prueba ciclista y paran el tráfico durante unos minutos. Aprovecho para rebuscar ositos de golosina entre mis bolsillos y ver pasar un pelotón dividido en 3 partes rodando a plato y sin poder meter un papel entre ellos…. Sinceramente no se de qué prueba se trataba pero es brutal ver un grupo compacto a tan alta velocidad, hablándose entre miembros del propio equipo y parece mentira que no se toquen entre ellos… vaya leche me metía yo ahí en medio.

Otros 10 minutos parado y cada vez tengo menos margen para realizar kilómetros antes de llegar a las 12:15h, hora límite planeada para llegar a casa. Reemprendo el pedaleo una vez pasa el coche portador de la bandera verde y ya estoy cercano a Sant Feliu de Codines. A partir de aquí el camino ya es un viejo conocido y voy calculando la hora y kilómetros a la llegada a Terrassa para saber qué puedo añadir a la ruta.

Las poblaciones van pasando: Sant Feliu, Caldes, Sentmenat, Castellar…. Hasta Castellar todavía llevo la idea de sumar unos 20-30km a mi llegada a Terrassa, bien sea subiendo al Obac o a la Mata.

Pero los últimos kilómetros antes de alcanzar Terrassa me ponen en mi lugar y en los pequeños repechos tiendo con demasiada frecuencia a mirar hacia el cambio por si llevo algún piñón menos del que creía o hacia los frenos por si alguna pastilla estuviese frenando la rueda…. Señal clara de que ya no queda demasiada gasolina para gastar.

Al llegar a Terrassa ya tengo muy claro que la única carretera que puedo tomar para seguir sumando kilómetros es nuevamente la de Castellar así que doy media vuelta en Can Petit y me dirijo nuevamente hacia el Atlétic.

Paso la curva donde me fui al suelo unas horas antes y pese a ir decidido a pasarla acoplado y rápido, no puedo evitar un sutil toque en el freno instantes antes de entrar en la curva, jejeje…

En Castellar me encuentro con Isma Oliver quien está dándole al pico con dos chicas (si es que….) y me explica que hará unos 100km y transición a correr. Me despido y continuo dirección Sant Llorenç Savall hasta ver los 110Km en la pantalla del Sigma, media vuelta y a sufrir los últimos kilómetros con la sensación de no ir ni para atrás.

No puedo evitar pensar, al llegar a casa, que todavía me quedarían 55km por completar y una maratón en una recta interminable de más de 5km que hay que recorrer 8 veces, por no hablar de los 3,8Km previos de natación…. Tal como he llegado hoy, lo veo muy lejano pero como cantaba La Orquesta Platería: “La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida… ay Dios!”.

Por suerte, tras la paliza mental que ha supuesto la bicicleta de la mañana, hoy celebramos el aniversario de Carles en su casa de Sant Vicenç con todos los ingredientes para pasar una magnífica tarde: barbacoa de carne, buen vino, genial compañía, sesión de guitarra y voz, unas copas para calentar el cuerpo cuando la temperatura baja y risas sin parar…. Si no fuera por esos ratitos!!!.

Lo que dieron de sí las dos semanas:

SEMANA 18
Natación: 4100
Ciclismo: 137
Carrera: 33

SEMANA 19
Natación: 4200
Ciclismo: 181
Carrera: 48

2 comentarios:

  1. sembla que només visqueu per l'esport !!
    quins pàjarus... això d'arribar a Terrassa per després tornar a Castellar i desfer camí, personalment ho trobo de viciats ! amb tant d'entrenament et sortiràs fijo a l'Iron.
    I qué més..... doncs recomanar-te que vigilis una mica més que la sra. et vol veure sencer per casa cada cop que tornis. Sort que d'ensurts com el del darrer diumenge n'hi ha ben pocs !
    Ànims amb l'objectiu xavalin

    ResponderEliminar
  2. Si caus prop de casa intenta tornar, amb la calma et cures les ferides , t'avitualles mires la bici i tornes a la carretera ;) jo mateix vaig tornar a caure dimecres passat anant amb el Martí.. estic d'un torpe.. jeje. Ah, la competició que vas veure era el campionat de Sabadell elit, pujaven per gallifa a castellterçol i tornaven per calders, el dissabte per la tarda ja havien fet una altra amb un corregut molt similar, jo vaig còrrer amb ells i buffff
    Ànims , vinga a continuar que vas bé!

    ResponderEliminar